La obesidad, el no dormir y la diabetes.
(NaturalNews) No debería haber ninguna duda de que las tasas de sobre peso y obesidad que siguen creciendo, se han vuelto tan frecuentes en el último medio siglo que están dañando la salud y la vida de millones de personas alrededor del mundo. Típicamente, el exceso de peso aumenta la presión arterial, conduce a enfermedades cardiovasculares y causa aun la muerte tambien provoca disfunción metabólica causando diabetes y resistencia a la insulina. Alimentos procesados y refinados, desarrollados en una fábrica se empacan con carbohidratos que se liberan rápidamente, azúcares y grasas hidrogenadas las cuales son la causa de muchas enfermedades crónicas y de mortalidad temprana.

La duración y la calidad de lo que uno duerme también está emergiendo como un factor crítico que subyace la tendencia a la obesidad y el metabolismo de insulina. Investigadores de la Universidad de Chicago han publicado el resultado de un estudio en Annals of Internal Medicine que explica cómo no dormir suficiente tiene un impacto dañino en las células de grasa, reduciendo su capacidad para responder a la insulina hasta un 30 por ciento, una hormona que regula la energía.
Dormir menos de siete horas cada noche aumenta considerablemente la resistencia a la insulina

En anteriores trabajos de investigación, los científicos han encontrado que la privación del sueño ha sido asociado con la función de deterioro cerebral por mucho tiempo, causando disminución del estado de alerta y reducida capacidad cognitiva. En este estudio, los investigadores describen un mecanismo molecular que conecta directamente la pérdida de sueño a la interrupción de la regulación de energía en los seres humanos, un proceso que con tiempo, puede causar aumento de peso, diabetes y otros problemas de salud.

El Dr. Matthew Brady,  principal investigador señaló "mucha gente piensa de la grasa como un problema, pero sirve una función vital... en modo de almacenamiento, las células de grasa eliminan ácidos grasosos y lípidos de la circulación donde pueden dañar otros tejidos. Cuando las célulasde grasa no pueden responder con eficacia a la insulina, estos lípidos se filtran en la circulación, causando graves complicaciones." El equipo reclutó a siete jóvenes voluntarios, seis hombres y una mujer. Cada uno durmió profundamente por ocho horas y media por cuatro nochesconsecutivas, y 30 días más tarde, le redujeron el tiempo para dormir a cuatro horas y media. Comida fue cuidadosamente monitoreada y controlada.

Después de las pruebas de resistencia a la insulina celular, los investigadores encontraron que después de cuatro noches de sueño corto, la respuesta de la insulina del cuerpo total disminuyó un promedio de 16 por ciento y la sensibilidad a la insulina disminuyó un 30 por ciento. Los autores concluyeron que "dormir por lo menos cuatro o cinco horas por noche, en días de trabajo, es algo común hoy en día... se encontró que todos los sujetos demostraron un cambio significativo en la sensibilidad a la insulina. Ellos no están tolerando las consecuencias metabólicas." Horarios de sueño corto, especialmente como le sucede a muchos durante una semana de trabajo, es perjudicial para la salud y es un factor atenuante en síndrome metabólico que conduce a la diabetes.